19.10.12

Entonces, escribir sería algo así como la otra cara de mi incapacidad de hacer.
Pero, ¿de qué sirve este análisis superficial sobre mi pequeña persona incapaz, ineficaz?
Y en mi mente, la ausencia de lo eterno. Si nada perdura, ¿a qué me puedo aferrar? A la poesía. Pero no seas tan cursi, por favor, tan básica. Es un engaño. Toda yo, engaño. 

Ahora, como me han enseñado que no se debe matar, escribiré. Digo ahora por no decir siempre, desde siempre, para siempre. Alguna manera de satisfacer impulsos enfermos. En definitiva, matar puede significar muchísimas cosas. No recurras a explicaciones, ¿quién las merece? Yo no las merezco.
El pajarito que picotea, molesto, insensato. Es ese el homicidio que me seduce. Con furia y sin piedad, hasta que la sangre humille a la inmensidad del mar. 


1 comentario:

  1. Hola.
    Es muy tarde.
    No puedo dormir.
    Describiste perfecto lo que siento.

    Gracias!

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copos de azúcar